E torniquete es un dispositivo que corta toda la circulación sanguínea de la parte del cuerpo en la que se haya colocado. Es una medida muy agresiva ya que puede provocar daños en la víctima, incluso, si está mal colocado, puede provocar la muerte de esta. Por lo tanto, solo se aplicará en casos muy excepcionales y sólo en extremidades.
Cuando colocamos un torniquete, la falta de aporte sanguíneo conlleva la falta de oxigenación de los tejidos que se encuentren por debajo del nivel donde se haya colocado. Esto produce la muerte de los tejidos y la formación de toxinas por la necrosis y la formación de trombos.
Un torniquete puede significar la pérdida del miembro donde se haya colocado, además de el peligro que supone el retorno por la vía venosa de las toxinas y trombos producidos, por ello, hay que tener extremo cuidado en su utilización.
Algunos ejemplos de cuando se debe aplicar un torniquete:
Debemos ser muy prudentes con el uso de esta técnica. En el caso de que no tengamos otra opción y haya que realizarla, es indispensable hacerla correctamente.
Para hacer un torniquete efectivo debemos seguir las siguientes pautas:
Cuando colocamos un torniquete, la falta de aporte sanguíneo conlleva la falta de oxigenación de los tejidos que se encuentren por debajo del nivel donde se haya colocado. Esto produce la muerte de los tejidos y la formación de toxinas por la necrosis y la formación de trombos.
Un torniquete puede significar la pérdida del miembro donde se haya colocado, además de el peligro que supone el retorno por la vía venosa de las toxinas y trombos producidos, por ello, hay que tener extremo cuidado en su utilización.
Algunos ejemplos de cuando se debe aplicar un torniquete:
- En grandes Catástrofes en las que hay un gran número de víctimas o el número de heridos sobrepase ampliamente el de sanitarios.
- En casos de amputaciones traumáticas, si existe una gran hemorragia y cuando el protocolo falle.
- Cuando exista una situación de riesgo vital (gran hemorragia y no sea posible la evacuación a un centro sanitario a corto plazo).
- Ante un herido con síndrome de aplastamiento, antes de retirar el objeto que lo está comprimiendo. Se usa para evitar que las toxinas liberadas lleguen al torrente sanguíneo mediante el retorno venoso. Esto se denomina un "torniquete natural".
Debemos ser muy prudentes con el uso de esta técnica. En el caso de que no tengamos otra opción y haya que realizarla, es indispensable hacerla correctamente.
Para hacer un torniquete efectivo debemos seguir las siguientes pautas:
- Solo se realizará en las extremidades, en la parte que solo consta de un hueso.
- Deberemos realizarlo siempre por encima del foco de la hemorragia y lo más cerca posible a ella.
- Se utilizará una cinta no elástica y ancha.
- La cinta debe dar dos vueltas alrededor de la extremidad y a continuación haremos un nudo sencillo.
- Sobre este nudo hay que aplicar un objeto alargado y consistente horizontalmente como puede ser un palo, que hay que fijar con dos nudos simples.
- Se girará el objeto hasta cortar la hemorragia.
- A continuación, fijaremos los extremos del objeto alargado para que no gire en sentido contrario y afloje la presión.
- Es indispensable anotar la hora exacta y el lugar donde hemos colocado el torniquete.
- Después colocamos al paciente en un lugar visible.
- Nunca deberemos aflojar el torniquete ( salvo que lo haga el personal sanitario).
- Por último arroparemos al paciente y lo mantendremos vigilado por si se produjese un shock.
FUENTE:
http://www.redes-cepalcala.org/inspector/DOCUMENTOS%20Y%20LIBROS/SEGURIDAD-TRABAJO/MANUAL%20DE%20PRIMEROS%20AUXILIOS.pdf
https://cursodeprimerosauxilios.files.wordpress.com/2010/10/torniquete.png
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