Picaduras de abeja

Las picaduras de abeja son las más comunes. El veneno que contiene el aguijón provoca un dolor muy intenso en el momento, con la formación de una púpula( hinchazón y enrojecimiento del área en que se produjo la picadura). 

Nuestra actuación se basará en tres pasos:

• Tranquilizaremos al afectado
• Retiraremos el aguijón con cuidado de no apretar por si pudiese penetrar por debajo de la piel.
• Para reducir la hinchazón aplicaremos compresas frías sobre la zona.

El problema de las picaduras de abeja surge cuando la persona sufre alergia, la reacción que pueda presentar sin el tratamiento adecuado puede llegar a producir la muerte, así que es esencial reaccionar a tiempo. 

El desarrollo de una alergia es progresiva, esto significa que no presentará la misma reacción ante la primera picadura que ante posteriores picaduras:

• La persona con la primera picadura presenta síntomas normales, lo que ocurre es que se sensibiliza.

• Con la segunda, se producen una serie de síntomas a través de los que reconoceremos si la persona es alérgica o no: enrojecimiento e inflamación de zonas apartadas de la picadura, sensación de mareo y ahogo en la garganta.

• La tercera picadura puede originar un shock anafilático. La anafilaxia es una reacción inmunitaria que puede desencadenar una parada cardiorrespiratoria, se identifica por síntomas como náuseas, dificultad respiratoria, ansiedad, aparición de ampollas e hinchazón de los párpados.

¿ CÓMO ACTUAREMOS ANTE ESTÁ SITUACIÓN?

Tendremos que llevar a la víctima inmediatamente a un centro de salud, posteriormente tendrá que acudir a su médico para hacer las pruebas de alergia.

Si pincháis en el siguiente vídeo podréis informaros más acerca de la prevención y tratamiento de picaduras de abejas: