Hoy dedicaremos esta entrada a hablar sobre los cuidados prehospitalarios de las dislocaciones de hombro, ya que producen mucho dolor e impiden el movimiento del brazo. Además producen muchas veces hematoma e hinchazón en la zona.
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Lo que ocurre en este tipo de lesiones es que el húmero se separa de la cavidad glenoidea de la escápula debido a una caída o un accidente deportivo; puede que se hayan desgarrado o forzado alguno de los músculos, ligamentos o tendones de la articulación del hombro.
Debemos permanecer al lado de la víctima mientras no llega la ayuda sanitaria, ya que el dolor puede llegar a ser muy fuerte y podría perder incluso el conocimiento. Como auxiliadores tenemos que seguir una serie de puntos en este tipo de accidentes:
- Haremos que el brazo de la víctima permanezca inmóvil, posicionado al lado del cuerpo.
- Para reducir la hinchazón aplicaremos hielo o compresas frías en el área lesionada.
- Si tiene una herida la limpiaremos y cubriremos con gasas o telas limpias.
- En caso de que la víctima tenga puesto un anillo o pulseras, se las retiraremos.
- Si sabemos con toda seguridad que puede tomar analgésicos como Ibuprofeno o Paracetamol podemos ofrecérselos para aliviar el dolor.
Es muy importante que sigamos estas pautas porque el médico que vaya a recolocar el hueso en su sitio, tendrá en cuenta el tiempo desde que la víctima sufrió la lesión para decidir que maniobra llevar a cabo,o si necesita o no suministrar anestesia.
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